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Biografía de Ryszard Kapuscinski

Kapuscinski nació el 4 de marzo de 1932 en Pinsk (Bielorusia) y era licenciado en Historia. Con 17 años se inició en el periodismo en la revista Hoy y mañana, pero se forjó como profesional en la agencia de noticias polaca PAP, para la que trabajó de reportero durante 30 años (1958-1981). Durante ese tiempo fue testigo de multitud de acontecimientos mundiales, como los numerosos cambios políticos de países del Tercer Mundo. Desde Angola hasta el antiguo Zaire (hoy República Democrática del Congo), cubrió la descolonización y la consiguiente independencia en el Tercer Mundo. También asistió a la caída del régimen democrático chileno en 1973 y a la revolución islámica de Irán en 1979.  En su dilatada carrera presenció 27 revoluciones, vivió 12 frentes de guerra y fue condenado cuatro veces a ser fusilado. Harto de la censura polaca, a partir de la década de los 80 empezó a colaborar con periódicos y revistas internacionales, como The New York Times o Frankfurter Allgemeine Zeitung, a la vez que se introducía de lleno en el campo literario a través del gran reportaje. Fue elegido en 1999 mejor periodista polaco del siglo XX y distinguido con el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades en 2003 tiene una veintena de libros publicados. Se estrenó como autor con Bus po polsku (1962), pero el primero de importancia fue El emperador (1978, en castellano en 1989), sobre la caída del trono de Haile Selassie en Etiopía en 1974. Siguieron El Sha o la desmesura del poder (1987) -crónica del régimen despótico del monarca iraní Reza Pahlevi-, La guerra del fútbol y otros reportajes (1992), Imperio (1993) -sobre la extinta URSS- y Ébano (1998), -ambiciosa radiografía del continente negro-, dos de sus reportajes cumbre. Luego publicó Los cínicos no sirven para este oficio (2000) Desde África (2001) y, en edición no venal, Los cinco sentidos del periodista (2003), el libro-taller de la Fundación para un Nuevo Periodismo Latinoamericano (FNPI, 2004).                                                                                        En 2004 fue galardonado con el Premio Bruno Kreisky para libros políticos de Austria y doctorado honoris causa en 2005 por la Universidad catalana Ramón Llull. Dedicó los últimos años de su vida a viajar, impartir conferencias y reflexionar sobre el proceso de la globalización y sus consecuencias para la civilización humana. Además continuó escribiendo libros en su casa de Varsovia, donde fijó su última residencia. Allí falleció el 23 de enero de 2007 con 74 años no pudiendo recuperarse de una complicada operación a la que había sido sometido, a causa de una prolongada enfermedad.

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